Convento de las Brígidas, situado en el Palacio del Licenciado Butrón, prestigioso abogado de la Chancillería de Valladolid
Convento de las Brígidas, una vez aprobada la fundación de este convento, impulsada por Marina Escobar, se consiguió que las religiosas se instalasen en él en 1637, lamentablemente su impulsora no llegó a poder verlo, falleció cuatro años antes.
En principio se ubican en la Casa del Marqués de Villena, se hicieron con el palacio del Licenciado Butrón, realizando posteriormente reformas para convertir ambos edificios contiguos en convento.
Aunque la iglesia original data de 1637, es a principios del 1700 cuando se sustituye por la que ahora existe de mayores dimensiones y se finalizan los retablos.
A finales de los años 70 las religiosas se mudan al convento de la Avenida Gijón en la misma localidad.
La fachada del convento de las Brígidas es de dos cuerpos con pilastras toscanas, rodeada por dos alas que finalizan en espadañas para ubicar las campanas, toda ella construida de ladrillo.
En el segundo cuerpo se encuentra un ventanal, en los que a ambos lados están los escudos de la realeza y del convento en piedra.
La iglesia del convento de las Brígidas consta de una sola nave con bóveda de cañón con lunetos y fajones, adornada con formas rectas en yesería. Rematado con cúpula de media naranja se encuentra el crucero.
Por no haberse autorizado su traslado, y aunque no esté habitado, en el interior se encuentran la estructura de los retablos. El retablo mayor tiene un banco, en él van cuatro columnas salomónicas con tres huecos para esculturas. Rematado en semicírculo, tiene el escudo de la orden y el real. Los retablos colaterales son también salomónicos y cuentan con banco, cuerpo y ático. Las esculturas sí que fueron llevadas al convento nuevo.
En la Plaza de las Brígidas podemos encontrar un Restaurante con gran fama en Valladolid, «Don Bacalao», otorgado con varios premios, allí podemos degustar de varias formas este delicioso pescado.
También podemos acercarnos hasta la Plaza de San Pablo, pudiendo visitar su iglesia, así como el Museo de Escultura, o perdernos en la Plaza del Viejo Coso que tiene entrada justo desde la misma Plaza de las Brígidas.