Catedral de Valladolid

Catedral de Valladolid

La Catedral de Valladolid, de gran valor histórico, su restauración deja con la boca abierta a turistas y vallisoletanos

Se construyó en el siglo XVI según los planos de Juan de Herrera, la Catedral de Nuestra Señora de la Asunción de Valladolid más conocida como «La Inconclusa» ya que nunca se dio por finalizada su construcción.

En la Catedral está enterrado el Conde Ansúrez, fundador de Valladolid, tal y como es considerado.

Su proyecto consistía en tres naves y crucero, pero sólo se construyó hasta el crucero, y ahora también le falta una de sus torres ya que se hundió a mediados del siglo XIX, eso en lo que corresponde a la Catedral por fuera, por dentro es de estilo purista y sobrio con pocos elementos decorativos.

Catedral de Valladolid
Catedral de Valladolid

En la Catedral también se encuentra el Museo Diocesano y Catedralicio, ubicado en los restos de la catedral antigua, por lo que resulta de especial interés. Está formado por varias capillas funerarias adosadas a la Colegiata.

La entrada a la Catedral es gratuita, existiendo varias líneas de autobús cerca, así como un parking subterráneo.

El museo está abierto los días laborables de 10:00 a 13:30 y de 16:30 a 19:00 horas y los sábados, domingos y festivos de 10:00 a 14:00 horas.

Precio de la entrada: 3€.

En la Torre norte de la Catedral de Valladolid, se realizaron obras de limpieza y acondicionamiento, aprovechando esta situación se instaló un ascensor panorámico en la catedral permitiendo a los visitantes y subir hasta los 62 metros que tiene de altura la torre.

Torre de la Catedral de Valladolid
Torre de la Catedral de Valladolid

Además podemos visitar el campanario por dentro, la maquinaria de su reloj así como las salas de esferas y péndulos.

Con este ascensor, que abrió sus puertas en marzo, Valladolid consigue disfrutar de un mirador, pudiendo admirar la Ciudad desde las alturas, viendo así la Iglesia de Santa María de la Antigua, El Edificio «Duque de Lerma», Iglesias como San Pablo y San Benito, la Universidad, así como los edificios de la Plaza Mayor. La acogida ha resultado un éxito en el número de visitas, llegando a 6.768, es decir una media de 25 personas al día.

Siendo éste el primera año, además de turismo de fuera de Valladolid, han sido muchos los propios vallisoletanos los que han podido disfrutar de este mirador. En general está existiendo un repunte en el turismo, ya que el bus turístico ha superado las 12.000 personas, la primera vez en los últimos años.

Por supuesto el calendario de fiestas hace que estos datos sean posibles. Los meses que tienen mejores datos es septiembre, que coincide con las Fiestas de Valladolid, la Virgen de San Lorenzo, así como octubre con la Seminci, un gran reclamo es la Semana Santa, así como los puentes que animan a los turistas.

Cada vez más los turistas que planean hacer una escapada visitan las páginas web de la ciudad, preparando así su viaje sin necesidad de pasar por las Oficinas de Turismo, notando éstas un descenso de personas que no pasan por ellas.

Fachada de la Catedral de Valladolid
Fachada de la Catedral de Valladolid

Las entradas para subir al ascensor se sacan en la puerta del Museo Diocesano y Catedralicio en la Plaza de la Universidad, salvo los turnos programados para las tardes del viernes y sábados  y la mañana de los domingos que serán recogidos y abonados en la Oficina de Turismo de Valladolid ,máximo 14 personas por visita.

Los precios son: la entrada general 5€ y para mayores de 65 años y menores de 14, 4€. Si además queremos visitar el Museo Catedralicio el precio asciende a 8€.

Los horarios son: De martes a jueves, 11h, 12h, 13h, 17h y 18h. Los viernes y sábados, 11h, 12h, 13h, 18h, 19h, 20h y 21h, y los domingos 11h, 12h y 13h, los lunes está cerrado.

Su situación es clave para comenzar una visita por el centro de Valladolid. Situada a escasos metros de la Iglesia de Santa María de La Antigua, Teatro Calderón, Plaza de la Universidad, …. Se puede realizar un recorrido muy agradable.

Siendo toda la zona peatonal, cuenta con gran número de bares para tapear, restaurantes y poder pasar una magnífica sobremesa en cualquiera de las terrazas que nos ofrece el entorno de la Catedral.

Si todavía nos quedan ganas de fiesta para la noche, nos ofrece gran diversidad de locales para poder continuar, en un ambiente agradable.